Día de la mujer trabajadora. El largo camino hacia la igualdad.

Durante estos ya casi veinte años trabajando para la jardinería y las escuelas taller hemos observado muchos cambios, innovaciones tecnológicas, nuevas y agresivas plagas y especialmente muchas diferencias entre los alumnos de aquellos primeros años y este otro perfil de alumno con el que trabajamos hoy por hoy. Como consecuencia de mi experiencia tambien he podido ser espectador principal de la evolución de la mujer en el trabajo de la jardinería.

Y sobre ellas quiero escribir en esta entrada. Escribir  y felicitar.

No tuve la oportunidad, me alegro, de conocer aquellos años de represión hacia la mujer en su faceta laboral. Pero si es cierto que el papel de la mujer en el trabajo en general y en la  jardinería en particular ha cambiado y mucho. No hace más de diez años era inconcebible que una empresa del sector se aprovisionara en el apartado de recursos humanos de mujeres para su plantilla. Hoy en día es normal que la mujer trabaje en el mundo "verde", ya no solamente en viveros sino también en empresas de construcción y mantenimiento de jardines. 

Y todo ello se debe a tres factores que han sabido trabajar tanto  y en numerosos casos mejor que cualquier hombre:

"La dosis extra de responsabilidad, el mayor afán de superación y la calidad final de sus trabajos".

Recibir todas las jardineras mis felicitaciones por vuestro esfuerzo y con un acento especial en el caso de Estefanía y Raquel, antiguas alumnas de la escuela taller "els pinets", que la semana pasada regateaban el fantasma del paro y comenzaban a trabajar en una empresa donde podrán seguir demostrando las cualidades profesionales que atesoran.

Aún así, seguir luchando contra la corriente como hasta ahora y recordar que todavía existe muchas cimas que descubrir, como la llamada "segregación vertical", condición que lleva la la mayoría de los hombres a ocupar los puestos de mayor responsabilidad, mientras que a vosotras se os relega a puestos menos estratégicos.